De repente alguien grita: "el piso es lava". Esa frase basta para que los niños, adolescentes y adultos que estén en ese lugar corran para subirse, lo antes posible, a cualquier mueble u objeto que los ayude a dejar de pisar tierra firme.
"El suelo es lava" o, en inglés, "The floor is lava".
No es un reto complejo. Se trata, justamente, de jugar a que el suelo es lava volcánica al rojo vivo y buscar dónde subirse para evitar que los pies lo toquen. Luego del grito ("el suelo es lava"), los jugadores tienen cinco segundos para cumplir el desafío. Quien no lo logre en ese tiempo pierde.
Lo divertido de la cuestión es hacerlo en lugares donde es difícil de cumplir porque tienen cosas en la mano, porque están en lugares públicos o porque no tienen ninguna silla o banco cerca.
No se extrañen, entonces, si ven a una persona subida a un mostrador de un local, colgando de poste o encima de un tacho de basura.
Algunos aseguran que el origen de este desafío se remonta al año 1948, cuando el escritor Roald Dahl describió en "El Deseo," un juego infantil donde un niño imaginaba que una alfombra era lava ardiendo.