Los vecinos de Espeja de San Marcelino solían ir andando o con caballerías a Hontoria del Pinar a coger el tren o a comprar y vender mercaderías. Así surgió la llamada senda de Hontoria, que ha desaparecido en parte o hay que atravesar vallados al comienzo de su recorrido, pero que resulta fácilmente reconocible en el paraje denominado Los Cubillos, en la ladera que da acceso a la sierra de Costalago. Además recientemente se ha limpiado de aliagas, se han podado algunos jabinos y se ha señalizado con dos marcas verdes paralelas
Próximo a este tramo de la senda, en su parte alta y más horizontal hay una cueva, denominada de los Ovillos porque dicen que la descubrió una señora que iba desde Espeja y en el camino se le cayeron unos ovillos de lana que llevaba para vender, que fueron a parar dentro de la cueva.
Con cuidado se puede acceder a la cueva, que tiene una entrada triangular muy pequeña, hay que descolgarse aproximadamente 1,5 m. para entrar, siendo una estancia de forma prácticamente cúbica. En 2017 los equipadores de la via ferrata de la Pasarela de Espeja han puesto unas barras que facilitan la bajada y la subida, además de una cuerda para ayudar en el movimiento dentro de la cueva. En cualquier caso el caché se encuentra en las cercanías, no dentro, con lo que no es necesario acceder para encontrarlo.
Continuando la senda se alcanza la meseta de la Sierra de Costalago, que forma parte del parque natural del Cañón del Río Lobos. Desde ahí parten varias sendas, y se podría visitar el pueblo de Espeja de San Marcelino, su Torca, su pasarela-mirador y su vía ferrata al suroeste, Cabeza del Aro y el mirador de Costalago al sureste, continuar hasta Hontoria atravesando la sierra al noreste, o llegar al pico de Navas al noroeste, siendo este sendero uno de los más sencillos para el ascenso a este pico, que es el punto más alto del parque natural. En todos estos sitios hay más cachés para buscar.
