"En 1905 , cuando el teatro pertenecía ya a Teresa Pujol Costa, que lo había comprado a los herederos de Perejoan y Amigó en 1899 , ésta lo arrendó al badalonés Joaquim Nicolau, para convertirlo en una cine, la segunda de la ciudad después del cine Mary , con el que pronto rivalizó. La ??inauguración fue el 22 de abril, y a pesar de esta conversión continuó existiendo de manera esporádica actividad teatral, como en 1910 cuando se anunció obras de otras durante el verano en cargo de la compañía del teatro Romea de Barcelona.
En 1931, con la llegada del cine sonoro, la sala tuvo que adaptarse y cerró dos meses para instalar los aparatos de sonorización. Tras la guerra, el local fue dirigido por el empresario Josep Salsas i Arquer,
ya partir de 1954 cambió su nombre por cine Aya. Además, en 1951 el propietario, David Cuyàs y Pujol, lo vendió a Joan Rifà y Rigola. Parece que el cambio de nombre respondía al hecho de utilizar una palabra de la primera letra del alfabeto, además de utilizar la palabra «aya», que en castellano significa nodriza o nodriza, denotando que, con la desaparición del cine Mary, el Zorrilla se había convertido en la decana de las salas de cine badalonesas, la cual había nutrido y facilitado el crecimiento de las demás.
Inicialmente, el Aya se dedicó a pasar reestrenos, pero a mediados de 1955 llegó a un acuerdo de unificación de la programación con los cines Picarol y Principal , mediante el cual las tres salas podían exhibir las mismas películas. películas, y mínimo una debía ofrecer un programa apto para menores durante la semana. El mismo año, dejó de ofrecer espectáculos de variedades, instaló nuevas máquinas, una pantalla panorámica, y una potencia lumínica adecuada, después de muchos años sin realizar reformas.
El cine acabó desplazando definitivamente al teatro, y la sala mantuvo actividad hasta 1970, cuando cerró definitivamente. La sala con los años se había visto abocada a una progresiva degradación debido a la crisis general del cine y los problemas económicos de la empresa."
(
visit link)
In 1905, when the theater already belonged to Teresa Pujol Costa, who had bought it from the heirs of Perejoan and Amigó in 1899, she leased it to Joaquim Nicolau from Badalona, ??to convert it into a cinema, the second in the city after the cinema. Mary, with whom he soon rivaled. The inauguration was on April 22, and despite this conversion theatrical activity continued to exist sporadically, as in 1910 when other works were announced during the summer by the theater company. Romea from Barcelona.
In 1931, with the arrival of talkies, the theater had to adapt and closed for two months to install sound equipment. After the war, the place was run by businessman Josep Salsas i Arquer,
and from 1954 it changed its name to Aya cinema. Furthermore, in 1951 the owner, David Cuyàs y Pujol, sold it to Joan Rifà y Rigola. It seems that the name change responded to the fact of using a word from the first letter of the alphabet, in addition to using the word "aya", which in Spanish means nurse or nurse, denoting that, with the disappearance of the Mary cinema, the Zorrilla was had become the dean of Badalona's movie theaters, which had nurtured and facilitated the growth of the others.
Initially, the Aya was dedicated to showing reruns, but in mid-1955 it reached an agreement to unify the programming with the Picarol and Principal cinemas, through which the three theaters could show the same films. movies, and at least one had to offer a program suitable for minors during the week. The same year, it stopped offering variety shows, installed new machines, a panoramic screen, and adequate lighting power, after many years without renovations.
The cinema ended up definitively displacing the theater, and the theater remained active until 1970, when it closed permanently. "Over the years, the theater had been doomed to progressive degradation due to the general crisis of cinema and the company's economic problems."
(
visit link)