On the wall of the Temple of Christ the King, a plaque commemorates the 50th anniversary of the coronation of the Virgin of Guadalupe. The relief illustrates the Virgin's words to Juan Diego.
Indulgencia por los 125 años de la coronación de la Virgen de Guadalupe
Credits
La Insigne y Nacional Basílica de Guadalupe inició un Año Jubilar el 8 de septiembre de 2019 concedido por el Papa Francisco, al conmemorarse los 125 años de la Coronación Pontificia de la Virgen de Guadalupe.
Y el pasado 20 de septiembre de 2020, el Arzobispo Primado Carlos Aguiar dio a conocer que el Año Jubilar Guadalupano Plancartino se extendió hasta el 12 de octubre de 2021, debido a los problemas generados por la pandemia de COVID-19.
La Indulgencia Plenaria se otorga a quien peregrine a la Basílica de Guadalupe y cumpla con las condiciones de costumbre para ganar dicha gracia: confesarse, comulgar y orar por las intenciones del Papa.
El Papa Francisco concedió ampliar hasta el 12 de octubre de 2021 el Año Jubilar Guadalupano Plancartino, que inició en…
Hace casi 125 años
La histórica coronación tuvo lugar el 12 de octubre de 1895, pero antes de esta fecha, Lorenzo Boturini ya había pensado en la coronación desde que llegó a México en 1735, y para tal fin, invirtió su fortuna en adquirir y coleccionar toda clase de pruebas e informaciones sobre el Acontecimiento Guadalupano de 1531.
Leer: Así puedes ganar la Indulgencia Plenaria en la Basílica de Guadalupe
Ciento cuarenta y tres años después de las gestiones emprendidas por Boturini, tres arzobispos mexicanos retomaron el tema: el de México, Pelagio Antonio de Labastida y Dávalos; el de Guadalajara, Don Pedro Loza, y el de Morelia, Ignacio Arciga, quienes hicieron la solicitud a la Santa Sede.
La respuesta del Papa León XIII fue casi inmediata: el 8 de febrero de 1887, pero aconsejados por el Abad de la Basílica, Antonio Plancarte y Labastida, la ceremonia se difirió para remozar el santuario y edificar un nuevo altar; estas obras se prolongaron hasta 1895, y en tanto, la tilma de San Juan Diego permaneció temporalmente en el Templo de Capuchinas.
Para la realización de la corona se hizo un concurso que fue ganado por Rómulo Escudero y Pérez Gallardo, y Salomé Piña; la realización del proyecto se hizo en París, Francia, con el orfebre Edgar Morgan. Se trataba de una corona de plata de corte imperial, de 62 centímetros de alto y 59 de circunferencia. Incluía los escudos de 22 diócesis y las tres arquidiócesis existentes, así como el escudo pontificio y el de la Ciudad de México.
Como un símbolo de unidad continental se escogió la fecha del 12 de octubre de 1895, al medio día, y a la ceremonia asistieron todos los obispos del país y otros más que fueron invitados, además del cuerpo diplomático, y personalidades del gobierno.
Como parte de la ceremonia, todos los obispos pusieron sus mitras y báculos a los pies de la Virgen de Guadalupe, en señal de sumisión.
Desde entonces, la Virgen de Guadalupe ha recibido como obsequio varias coronas, entre ellas, las de San Juan Pablo II, el 27 de enero de 1979, y otra más del Papa Francisco. Paulo VI le había enviado antes, una rosa de oro, el 20 de marzo de 1966.
Las condiciones para ganar una indulgencia en la Basílica de Guadalupe son:
Para obtener la indulgencia plenaria es necesario:
Un rechazo firme al pecado.
El deseo expreso de ganar la indulgencia.
Confesarse o estar en gracia de Dios.
Comulgar y orar por las intenciones del Papa.
Alguna acción especificada en el decreto particular. (En este caso: participar en Misa en la Basílica de Guadalupe)
Se puede ganar una indulgencia plenaria cada día y se pueden aplicar a los fieles difuntos.
También pueden ganarla los fieles que por una razonable circunstancia no participen físicamente en la Misa en la Basílica de Guadalupe, pero que participen a través de los medios de comunicación de la radio, televisión o internet.
Indulgence for the 125th Anniversary of the Coronation of Our Lady of Guadalupe
The Insigne and National Basilica of Guadalupe began a Jubilee Year on September 8, 2019 granted by Pope Francis, commemorating the 125th anniversary of the Pontifical Coronation of the Virgin of Guadalupe.
And last September 20, 2020, Archbishop Primate Carlos Aguiar made known that the Guadalupan Plancartino Jubilee Year was extended until October 12, 2021, due to the problems generated by the COVID-19 pandemic.
The Plenary Indulgence is granted to whoever goes on pilgrimage to the Basilica of Guadalupe and fulfills the usual conditions to gain such grace: confession, communion and prayer for the Pope's intentions.
Pope Francis granted to extend until October 12, 2021 the Guadalupan Plancartino Jubilee Year, which began in...
Almost 125 years ago
The historic coronation took place on October 12, 1895, but before this date, Lorenzo Boturini had already been thinking about the coronation since he arrived in Mexico in 1735, and to that end, he invested his fortune in acquiring and collecting all kinds of evidence and information about the Guadalupan Event of 1531.
Read more: This is how you can gain the Plenary Indulgence in the Basilica of Guadalupe.
One hundred and forty-three years after Boturini's efforts, three Mexican archbishops took up the subject again: Pelagio Antonio de Labastida y Dávalos of Mexico, Don Pedro Loza of Guadalajara, and Ignacio Arciga of Morelia, who made the request to the Holy See.
The response of Pope Leo XIII was almost immediate: on February 8, 1887, but advised by the Abbot of the Basilica, Antonio Plancarte y Labastida, the ceremony was postponed in order to remodel the sanctuary and build a new altar; these works were prolonged until 1895, and meanwhile, the tilma of San Juan Diego remained temporarily in the Temple of Capuchinas.
For the realization of the crown a contest was made that was won by Rómulo Escudero y Pérez Gallardo, and Salomé Piña; the realization of the project was made in Paris, France, with the goldsmith Edgar Morgan. It was a silver crown of imperial cut, 62 centimeters high and 59 of circumference. It included the coats of arms of 22 dioceses and the three existing archdioceses, as well as the pontifical coat of arms and that of Mexico City.
As a symbol of continental unity, the date of October 12, 1895, at noon, was chosen, and the ceremony was attended by all the bishops of the country and others who were invited, as well as the diplomatic corps and government personalities.
As part of the ceremony, all the bishops placed their miters and staffs at the feet of the Virgin of Guadalupe, as a sign of submission.
Since then, the Virgin of Guadalupe has received as a gift several crowns, among them, those of St. John Paul II, on January 27, 1979, and another one from Pope Francis. Paul VI had previously sent her a golden rose on March 20, 1966.
The conditions to gain an indulgence in the Basilica of Guadalupe are:
To obtain the plenary indulgence is necessary:
A firm rejection of sin.
The express desire to gain the indulgence.
To go to confession or to be in the grace of God.
Communion and prayer for the Pope's intentions.
Some action specified in the particular decree (in this case: participating in Mass at the Basilica of Guadalupe).
A plenary indulgence can be gained each day and can be applied to the faithful departed.
It can also be earned by the faithful who for a reasonable circumstance do not physically participate in the Mass at the Basilica of Guadalupe, but participate through the media of radio, television or internet.