Te proponemos una serie de rutas culturales diferentes por el Prepirineo Aragonés. Una forma diferente de conocer el patrimonio que pocas veces sale en las visitas culturales. Un viaje al lado más escondido y desconocido de nuestro territorio. A lo largo de las rutas hemos escondido pistas e inventado historias para mostrarte de forma divertida esta belleza sumergida. !Adelante y no olvides encender tu GPS!
EL TESORO PERDIDO DE AL MUQTADIR
Encuentra el tesoro perdido de Al-Muqtadir: 50.000 monedas de oro que nunca llegaron a su destino. Desde Ramiro I a Juana Enriquez, todos los reyes aragoneses han intentado encontrarlas pero ¿sería cierto o sólo una leyenda?
La ruta transcurre por Sos del Rey Católico, Uncastillo, Bolea, Loarre, Huesca, Barbastro y Alquézar.Puedes seguir esta ruta a pie, en bike,a caballo o hacerla en varias etapas diferentes. En cada una de las etapas tienes una gran visita cultural por hacer: románico, arquitectura medieval, grandes construcciones y mejores recuerdos.
Alquézar
Alquézar la irregular, la aventurera, la bellísima. Es una de las ciudades más bellas de Aragón. El encanto de Alquézar reside en la irregularidad de su trazado, su método constructivo y de su color. Alquézar es como una sirena, cuando la ves estás perdido. No puedes hacer nada para no amarla.
Hemos preparado un recorrido por la ciudad para que puedas ver todos los pequeños detalles que esconde. La puedes consultar en Prepirineo Clandestino.
La búsqueda de Sancha de Aragón
Sancha de Aragón buscó el tesoro de Al Muqtadir en Alquézar. Te dejamos su historia:
Petronila no fue la primera en buscar el tesoro. ¡Qué va! Antes que ella su tía Sancha de Aragón, hermana de su padre, lo buscó con verdadera desesperación.
Sancha había estado presente en la caída de Barbastro. No en vano ella era la mujer del libertador de la ciudad: el Conde de Urgell. Sabía cada golpe, estocada y desesperación de la batalla y también la historia del secreto de punta a punta.
Doña Sancha sabía que el tesoro no estaba en Barbastro. !Cómo iba a estar allí si pusieron todo patas arriba! No quedó ni un milímetro que registrar. No. No podía estar en Barbastro. Pero si muy cerca… Alquézar. Su hermano la había conquistado unos años antes que Barbastro y aunque ya era católica aún vivían gentes musulmanas allí. Seguro que los habían acogido y seguro que ella encontraría el tesoro.