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PANTEON DE QUIJANO
LOS VAGABUNDOS
SITUACIÓN DEL CACHE:
Este Nano-Cache imantado esta situado en la Plaza de Santa Teresa (Panteón de Quijano) de Alicante, muy cerquita de la Plaza de Toros, este jardin suele estar ocupado tambien por Vagabundos que NO suelen ser conflictivos, ni violentos.
Recomiendo examinar la foto spoiler, porque las coordenadas no son precisas, a pesar de todos mis esfuerzos por lograr unas buenas coordenadas, la recepciòn es mala en la zona debido a los arboles y edificios altos cercanos. Tambien os recuerdo que el Panteon-Jardin tiene un horario de apertura al publico de 10 a 21 h.
DESCRIPCIÓN DEL CACHE:
Es el tipico nano con un iman, en su interior solo encontraréis un pequeño libro de registro, pues no cabe mas. No olvidar llevar boli o lapiz para loguear.
ATENCION:
Puede ser, una zona muy concurrida, ser muy discretos en su busqueda y localización, una vez descubierto y registrado en el libro, cerrarlo y ocultarlo bien, esconderlo con cuidado que NO os vean, ya que puede ser visible y podría ser expoliado con facilidad. Espero que os guste, disfrutéis de este NANO-caché y de este magnifico jardin y del celebre Panteon de Quijano.
Espero que subais fotos de vuestra busqueda, asi como el relato de la experiencia....... Mucha suerte amigos........ (fotos propias)
PANTEON DE QUIJANO
PEQUEÑA HISTORIA
Es el mejor exponente de Jardin romantico alicantino, esta tomada por todo tipo de vagabundos que NO suelen ser conflictivos ni violentos.
"En el año de 1855, el Ayuntamiento de Alicante cedió la plazoleta de Santa Teresa para que se construyera un panteón para acoger los restos de Don Trino Gonzalez de Quijano, Gobernador Civil de la epoca.
En la parte central de la plaza Santa Teresa se encuentra un jardín, conocido como el Panteón de Quijano, dedicado al recuerdo de quien desempeñara el cargo de gobernador civil de Alicante. Trino González de Quijano de Ituregui tomó posesión el 22 de agosto de 1854. Por aquellos años la ciudad sufría una epidemia de cólera. La capital, con un censo de 28.000 habitantes, sufrió un registro de mortalidad de cerca de dos mil vecinos.
Quijano, que perdió su vida al prodigar consuelos y atenciones a la provincia de Alicante en días luctuosos para ellos, visitó a muchas de las familias que padecían la enfermedad, lo que le conllevó a contagiarse. Falleció con tan solo 47 años de edad, por lo que solo estuvo al frente de su cargo como gobernador veinticuatro días.
La ciudad de Alicante le dedico este panteón -tres años después de su fallecimiento. El arquitecto municipal, Francisco Morell y Gómez, fue el autor del proyecto, que comenzó a construirse en julio de 1855 y se terminó en 1857. Fue costeado por los alicantinos.
El mausoleo es de granito sobre un basamento cuadrado, con un grupo alegórico de escultura a cada lado. Se eleva el sarcófago, de planta cuadrada, donde se conserva la urna que contienen sus restos mortales. Cada uno de sus frentes tiene una gran lápida con las correspondientes inscripciones, y sigue a este cuerpo un gracioso remate de cornisamenta, con las armas de Alicante, de Alcoy y de otras poblaciones, en las que extendio su labor benefica y sobre ellas sus nombres respectivos.
El 16 de septiembre de 1857 se celebraron los actos del traslado de sus restos desde el cementerio al panteón. Las calles de Alicante en las que transitó la comitiva mortuoria estaban abarrotadas de alicantinos, que presenciaron la marcha de un carro fúnebre preparado especialmente para el acto.
Abría la comitiva un piquete de caballería de la Guardia Civil, seguido de los cabildos de la ciudad que precedían al carro fúnebre. Luego marchaba la comisión organizadora que portaba la llave de la urna y el acta de la ceremonia a celebrar. El acto lo presidió el gobernador José María Palarea. Estuvo el Ayuntamiento en pleno y también una banda de música.
Durante muchos años los alicantinos celebraban actos en memoria de Quijano. En 1929, el alcalde Julio Suárez Llanos, con motivo del 75 aniversario del fallecimiento, invitó al tradicional acto de la procesión cívica, que desde la Casa Consistorial se dirigió al mausoleo que guarda las cenizas de aquel bienhechor.
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