Este caché forma parte de la serie dedicada al
Románico en Cantabria. Con esta serie pretendo dar a conocer
la riqueza artística que este estilo tiene en el norte de la
península, y mas concretamente, en Cantabria. A continuación, os
presento la Colegiata de Santa María, una auténtica joya
enclavada en el Valle del Besaya. Su emplazamiento se puede
calificar de estratégico, puesto que desde él, se domina toda la
que hoy conocemos como provincia de Santander. En el siglo XI
ya existía el monasterio, pero fue en el siglo XII cuando es
entregado a Cluny y, unos años mas tarde, a los agustinos.
ARQUITECTURA
La planta original era de una nave y cabecera
triabsidial, con crucero. Actualmente la parte septentrional ha
sido remplazada por varios cuerpos de estilo gótico. Respondería,
por tanto, a una influencia del románico castellano que vemos en
edificios como Frómista.
Esta organización, que se puede tachar de macrocefálica por el
amplio desarrollo del crucero y la cabecera respecto a la nave, es
frecuente en los edificios de fundación monástica.
Al exterior, se abren en el ábside tres ventanas alargadas,
decoradas con sencillez. La portada es muy sobria, las arquivoltas
no llevan decoración.
En el interior el ábside se cubre con bóveda de cañón sobre
fajones que apoyan en pilastras. Los capiteles, que son de gran
interés, tienen diferentes temáticas. La talla es sencilla pero
importante.
Observamos, en su fábrica primitiva, una clara
influencia del románico castellano, en tanto que se componía de una
nave, crucero no destacado, cabecera triple, con el ábside central
de mayor desarrollo y precedido por un tramo recto, torre cimborrio
sobre trompas y cubierta de cañón en la nave, transepto y tramo
recto, y de cuarto de esfera en los ábsides.
¿Qué se conserva de esta organización? El ábside septentrional, el
central, la torre cimborrio y, con modificaciones, la nave. Las
reformas que más afectaron a su plano original fueron; la
construcción de una nave paralela a la central en el lado norte, en
el siglo XIII, y la sustitución del ábside meridional por una
capilla cuadrada en el siglo XVIII.
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