Fervenza do Fondós Traditional Geocache

El monte del Garabullo y su bosque de alcornoques, a pesar de su interés, no es un lugar muy frecuentado por el turismo. El motivo es que el terreno es muy abrupto y en muchos lugares puede ser peligroso si no se pone suficiente atención.
En tiempos hubo al pie del penedo un letrero que indicaba la dirección a la Fervenza del río Fondós que se encuentra monte arriba. El letrero sigue, pero está pintado de blanco y ya no señala ningún camino. Inteligente opción para que gente que no está suficientemente preparada no visite un lugar donde el riesgo no es pequeño......

Entre esta roca y el llamado Cotarelo de 466 metros discurre el Rio Fondós que entrega sus aguas al Río Miño que en este lugar está embalsado a causa del Embalse de Os Peares cuya presa se encuentra a pocos kilómetros río abajo.
La dificultad del agua para erosionar estas rocas de cuarcita provoca la presencia de numerosos saltos y a ello le tenemos que añadir el gran desnivel que salta el río el cual pasa de una cota de 450m a 200m en menos de 1 km.
En este bosque abundan árboles como aciñeiras y las sobreiras (encinas y alcornoques), formando así el único bosque mediterráneo de la comarca de Chantada.



Esta gran formación rocosa que se yergue sobre el Fondós protege este tramo del río de los vientos del norte, causa más que probable causante del mayor alcornocal y bosque mediterráneo de la Ribeira Sacra del Miño.

El valor ambiental de este enclave se debe a la riqueza de su vegetación, pero también a una fauna abundante y variada. Abundan los reptiles y los pequeños mamíferos y también las aves rapaces.

Aguas transparentes, pequeños saltos y con mucha vegetación a su alrededor. Una delicia beber y refrescarse al sumergir los pies en el agua cristalina.
Un precioso rincón donde se encuentra paz y descanso al lado de la fervenza (cascada), lugar que seguro es hogar de xacias.

El caché se encuentra en la fervenza superior. Se recomienda mucha precaución por lo resbaladizo del acceso y mucho sigilo para no molestar a los seres fantásticos que la habitan.