Una de las 43 mámoas que hay reconocidos en la comarca.
La piedra superior fue expoliada en los últimos 5 años y de las piedras que la sostenían -a día de hoy- sólo es visible una ya que el resto fueron tapadas por tierra para evitar que el Concello hiciera algo allí y le expropiase esa zona del terreno. Está lleno de silvas, árboles y maleza.
Conserva escrituras petroglíficas del S. IV a.C.
Es un bote de cristal puesto detrás de la piedra que está visible.
Colocarlo muy bien detrás para que le dé la sombra y acordaros de llevar lápiz.