SPANISH VERSION:
Hace mucho tiempo se vivió una historia épica en la región de Urdania, territorio que se extendía desde la Urdana hasta el azud de Urdán. En las tierras de Iruela, situadas al este de la Urdania, habitaban los pueblos libres, que siempre habían vivido en armonía y eran conocidos por su habilidad en el arte del camuflaje.
Al oeste del azud de Urdán, origen del agua que abastecía a los pueblos libres, se expandían las tierras fétidas gobernadas por Geosauron, el enemigo de los pueblos libres.
Geosauron, harto de la complicidad existente entre los pueblos libres, se adentró en los pinares de apnape, al sur de la Urdania, y taló el Gran Pino, el árbol de la vida. Con la leña del árbol caído, aún rebosante de energía, talló con sus propias manos los dados únicos: dos dados de inigualable valía que entregó a los gobernantes de los grizzlies y de los zascandiles.
Los dados únicos ofrecían siempre respuestas únicas y verdaderas a quienes los poseían, pues heredaron la energía vital del Gran Pino ya que fueron tallados en el justo momento de su tala, pero a cambio de esas respuestas, con cada tirada, la energía vital de sus propietarios menguaba a partes iguales. Los dados se alimentaban de su energía vital, robándoles poco a poco sus capacidades y su buen juicio, y llenándoles el alma de la fetidez inherente a los pueblos gobernados por Geosauron.
Geosauron, en un intento de quebrantar la armonía que siempre había reinado entre sus pueblos, entregó un dado en ofrenda al gobernante de los grizzlies y otro al de los zascandiles. Esperaba con ello que la avaricia aflorase en ellos y los dos principales pueblos de las tierras libres luchasen entre si por el poder inigualable que ofrecería estar en posesión de los dos dados únicos. Al fin y al cabo, un dado único solo puede dar respuestas del 1 al 6, pero con los dos dados únicos, cualquier dígito del 0 al 9 sería posible con cada tirada.
Geosanmon el Sabio, se dio cuenta del engaño, e intentó convencer a los dueños de los dados únicos para que se deshicieran de ellos. Pero obviamente éstos, cegados por el poder de los dados, se negaron. Ante tal tesitura Geosanmon el Sabio no tuvo más remedio que pedir al pueblo de los pedorretas que fabricasen unos dados análogos para, aprovechando un descuido de sus dueños, dar el cambiazo por los dados únicos. Y así lo hizo.
Una vez con los dos dados únicos en su poder, Geosanmon el Sabio se adentró en las tierras olvidadas de los Agromenauer, al norte de la Urdania, para buscar a un ser de alma pura e inocente: el joven Geófrodo. Y le encomendó una misión de vital trascendencia: penetrar en los dominios de la Urdania camino del azud de Urdán con los dados únicos para destruirlos sumergiéndolos en sus aguas purificadoras. En ese viaje le acompañaría el pequeño Candelas, descendiente de los señores de Aslan, y habilidoso en las artes gráficas, cuya fama se extendía más allá de los dominios conocidos y de la sierra de Armantes, para que inmortalizase gráficamente todo el viaje, pues bien era conocido, que en esa época de la Edad del Hombre, pocos eran los que sabían leer o escribir…
Antes de partir, Geosanmon el Sabio hizo entrega a Geófrodo de un zurrón repleto de dados y le hizo extender su mano derecha. En ella depositó los dados únicos y le dijo:
- Examínalos bien y deposítalos en el zurrón, junto a los otros dados. Si en tu viaje necesitas conocer algún dato numérico, extrae los dados uno a uno, sin parar, y ves lanzándolos al suelo hasta que los dos dados únicos hayan salido del zurrón y entonces, suma sus valores. Si suman 10, 11 ó 12 la respuesta de los dados equivaldrá a 0, 1 ó 2. Pero utilízalos solo en caso de inevitable necesidad, o los dados acabarán poseyéndote a ti. Cuando estés preparado, Geófrodo, haremos una prueba.
- Ya lo estoy
- Veamos si es cierto: ¿ves este saquito? Contiene seis monedas de oro y otras tantas de plata. ¿Cuántas tendría que sacar como mínimo para estar seguro de tener dos del mismo material?
Geófrodo sacó hasta cuatro dados del zurrón y dio su respuesta. Lo meditó un momento y espetó:
- Lo siento, creo que no entendí cómo funcionaban los dados.
Y Geosanmon el Sabio le corrigió:
- Pequeño Geófrodo, lo entendiste a la perfección. He convencido a varios moradores de las Morellas para que te guíen por las tierras de la Urdania. Ya puedes emprender el camino.
El camino de Geófrodo por las Tierras de La Urdania no fue sencillo, pero eso ya no forma parte de la historia de este caché. No obstante, quizás sí te interesará saber que a mitad de camino Geófrodo se dio cuenta de que su fin andaba próximo, y decidió preguntar a los dados únicos por un lugar donde pudiera dejarlos a buen recaudo hasta que alguien con el valor y la pureza del alma necesaria para semejante hazaña pudiese terminar su misión. Hizo seis tiradas de dados, que se ilustran a continuación gracias a los grabados del pequeño Candelas que le acompaño en todo momento hasta el instante último de su muerte, e inmortalizó aquellas seis últimas tiradas de dados:
PUZZLE TO SOLVE
A
B
C
D
E
F
ATENCIÓN: Las coordenadas publicadas corresponden a una zona de aparcamiento libre desde donde podréis abordar la serie de cachés "El corredor del Gállego" y también el presente caché cuyas coordenadas finales corresponden a N 41° 40.ABC W 000° 50.DEF
Esta entrega de la serie pretende ser un homenaje/agradecimiento a aquellos geocachers zaragozanos de cuyos cachés más "found it" he registrado hasta la fecha de publicación del presente caché.
Podéis hacer click sobre el ojo de Geosauron más abajo para validar vuestras respuestas.
Las coordenadas finales de este caché se deben obtener íntegramente desde casa. No hagáis ningún desplazamiento en vano si el ojo de Geosauron no os las valida.
ENGLISH SUMMARY:
The story is a tribute to some geocachers from Zaragoza and it talks about the existence of the two unique dice.
Geosanmon gave to Geófrodo a dice bag and made him extend his right hand. Geosanmon put the two unique dice on the right hand of Geófrodo and then he said:
- Examine them and then insert them in the dice bag among the other dice. If you need to know any numerical data, extract the dice one by one from the dice bag and throw them to the ground until the two unique dice have left the bag and then sum the values of the two unique dice. If you obtain 10, 11 or 12 it will mean 0, 1 or 2.
To verify that Geófrodo understood it, Geosanmon asked him:
- Do you see this bag? It contains six gold coins and six silver coins. How many would I have to get (blindly) from the bag at least to be sure of having two coins made of the same material?
Geófrodo got four dice from the dice bag (see picture) and gave his response. He pondered a moment and blurted:
- Sorry , I did not understand how the dice work.
And Geosanmon corrected:
- Little Geófrodo , you understood perfectly.
Geófrodo could not finish his journey and hid the unique dice in N 41° 40.ABC W 000° 50.DEF.
You can click here to validate your solution.
The final coordinates for this cache must be obtained entirely from home. Don't go out in vain if Certitude does not validate it.