Skip to content

La Morada de Hypnos. Cap I. El Cerro de la Cruz Letterbox Hybrid

Hidden : 7/14/2011
Difficulty:
3 out of 5
Terrain:
3 out of 5

Size: Size:   small (small)

Join now to view geocache location details. It's free!

Watch

How Geocaching Works

Related Web Page

Please note Use of geocaching.com services is subject to the terms and conditions in our disclaimer.

Geocache Description:

Desde Almedinilla hay unos 3 km de dura subida hasta el caché.Tambien se puede subir en coche hasta el Cerro de la Cruz y andar por un desfiladero rocoso unos 100 metros.
Tener cuidado. Para los inexpertos puede ser algo peligroso.

La Morada del Dios Hypnos

Primer capítulo: El Cerro de la Cruz.

Si consigues llegar al final de este Letterbox, encontrarás la morada del Dios Hypnos, el Señor de la noche y los sueños, y podrás acceder a su reino.

Este letterbox está basado en el mito de Ceix y Alcione. Poema bellamente narrado en la obra "Las Metamorfosis", del poeta romano Publio Ovidio Nason.

Este mito, como su nombre hace preveer, se centra en los personajes de Ceix y Alcione.

Desposada con Ceix, rey de Traquinia, Alcione, hija de Eolo, el dios de los vientos, disfrutó de una feliz existencia hasta que su esposo, inquieto por un funesto presagio, decidió emprender viaje por mar hasta Claros, con el ánimo de consultar el oráculo de Apolo. El matrimonio de Alcione y Ceix había sido tan feliz que ella se atrevió, incluso, a llamarse a si misma Hera y a su esposo, Zeus, lo que, como no podía ser menos, causó la ira de esos dioses olímpicos, que valiéndose de una terrible tormenta hicieron naufragar la nave de Ceix, que falleció ahogado.

En la versión de este mito que Publio Ovidio Nason nos ofrece en "Las Metamorfosis" el autor nos narra como Alcione, ignorante de la muerte de su esposo, iba todos los días a los altares de la diosa Juno a pedirle que le devolviera a su marido, resultando inaguantable para la diosa el admitir por más tiempo esos sacrificios, dado que se estaban haciendo por una persona ya fallecida. Es así como Juno ordenará, a través de su mensajera Iris, al dios del Sueño, Hypnos, que se encargue de hacer saber a Alcione, valiéndose de sus poderes en la noche, cuando los humanos duermen, la cruel noticia de la muerte de Ceix.

El mito finaliza narrando como Alcione, loca de dolor, se arroja al mar en busca de su querido Ceix, siendo transformados ambos en aves (martín pescadores o gaviotas, según las versiones) por algún dios compadecido de su desgracia. Robert Graves, al explicarnos este mito, nos decía como "ahora, cada invierno, la martín pescadora lleva a su macho muerto con grandes lamentos a su entierro y luego construye un nido muy compacto con las espinas de la ortiga de mar, lo lanza al mar, pone sus huevos en él y empolla sus polluelos. Hace todo eso en los Días del Alción, o sea, los siete que proceden al solsticio invernal y los siete que le siguen, mientras Eolo prohíbe a sus vientos que agiten las aguas".

Otro poema que te puede dar pistas para esta aventura es el que acontinuación expongo, el cual, Publio Ovidio Nason ubica la morada del Dios Hypnos, Dios del Sueño. Has de saber que donde transcurre esta historia, Almedinilla, la realidad y la ficción del mito se dan la mano, ya que se ha descubierto una villa romana, curiosamente dedicada al Dios Hypnos, y el lugar donde se encontró la estatua, es un calco del que marcaba el autor en el siglo I.
¿Será esta suerte una especie de leyenda que se hace realidad?

El primer caché empieza en las inmediaciones de Almedinilla. En un pareje increible, El cerro de la Cruz. Aún se conserva en ese lugar un yacimiento Íbero de increible valor.
Te animo a visitarlo.

Te dejo con el poema que te marca la posición.
Empieza la aventura. Tendrás que resolver duros puzles.
¡Advertid@ quedas!
¡Suerte caminante en tu busca de la morada del Dios Hypnos!

Una tierra de sueños te espera.

La Morada del Dios Hypnos

Hay cerca de los cimerios, en un largo receso, una caverna,
un monte cavo, la casa y los penétrales del indolente Sueño,
en donde nunca con sus rayos, o surgiendo, o medio, o cayendo,
Febo acercarse puede. Nieblas con bruma mezcladas
exhala la tierra, y crepúsculos de dudosa luz.

No la vigilante ave allí, con los cantos de su encrestado busto,
evoca a la Aurora, ni con su voz los silencios rompen
solícitos los perros, o que los perros más sagaz el ganso.
No las fieras, no los ganados, no movidas por un soplo las ramas
o su sonido devuelve la barahúnda de la lengua humana.
La muda quietud lo habita. De una roca, aun así, honda,
sale el arroyo del agua del Olvido, merced al cual, con su murmullo resbalando,

invita a los sueños su onda con sus crepitantes guijarros.
Ante las puertas de la cueva fecundas adormideras florecen
e innumerables hierbas de cuya leche el sopor
la Noche cosecha y lo esparce húmeda por las opacas tierras.
Puerta, para que chirridos al volverse su gozne no haga,
ninguna en la casa toda hay, guardián en el umbral ninguno.

En medio un diván hay, del antro, de ébano, sublime él,
plúmeo, negricolor, de endrino cobertor tendido,
en donde reposa el propio dios, sus miembros por la languidez relajados.
De él alrededor, por todas partes, variadas formas imitando,
los sueños vanos yacen, tantos cuantos una cosecha de aristas,
un bosque lleva de frondas, de escupidas arenas una playa.

despierta al artífice y simulador de figuras,
a Morfeo: no que él ninguno otro más diestramente
reproduce el caminar y el porte y el sonido del hablar.
Añade además los vestidos y las más usuales palabras
de cada cual. Pero él solos a hombres imita. Mas otro
se hace fiera, se hace pájaro, se hace, de largo cuerpo, serpiente:
a él Ícelo los altísimos, el mortal vulgo Fobétor
le nombra. Hay también de diversa arte un tercero,
Fántaso. Él a la tierra, a una roca, a una ola, a un madero
y a cuanto vacío está todo de ánima, falazmente se pasa.
A los reyes él y a los generales su rostro mostrar
de noche suele, otros los pueblos y la plebe recorren.
Prescinde de ellos su señor y de todos los hermanos solo
a Morfeo, quien lleve a cabo de la Taumántide lo revelado, el Sueño
elige, y de nuevo en una blanda languidez relajado
depuso la cabeza y en el cobertor profundo la resguarda.

Publio Ovidio Nasón
Las Metamorfosis, Libro XI

Additional Hints (Decrypt)

Cbe ry qrfsvynqreb ebpbfb, fv gvrarf rdhvyvoevb l pbasvnamn, yyrtneáf ny grfbeb.

Decryption Key

A|B|C|D|E|F|G|H|I|J|K|L|M
-------------------------
N|O|P|Q|R|S|T|U|V|W|X|Y|Z

(letter above equals below, and vice versa)